El negocio de la vida no es negocio; es VIDA

Benigno Horna. Puente sobre el Río Kwai., Tailandia

A lo largo de todos estos años, durante los cuales he tenido la oportunidad de recorrer muchos países del mundo, conviviendo con distintas culturas, me he dado cuenta que el destino como tal no existe. Somos nosotros -los que somos libres- los que de verdad construimos día a día nuestro porvenir.

Amanecer en el  Polo Norte

No son las circunstancias las que a la larga determinan nuestro futuro, sino que son las decisiones que tomamos las que, de una manera u otra, moldean nuestra vida.

Isla de Games. Archipiélago de las Paridas. Océano Pacífico

También he tenido que superar muchas injusticias. Comprendí que yo no podía controlar lo que los demás esperaban de mí, pero sí podía dominar lo que yo creía y juzgaba de mí mismo.

Amanecer en Madrid

Aprendí a reabsorber una parte de mi orgullo y, pese a todo seguí sonriendo y luchando por construir un futuro mejor para mí, para mi hija, para mi familia y para todos aquellos seres humanos que nunca tendrán la oportunidad de conocer otros países ni otras culturas y que, por ende, no podrán percibir distintas formas de entender la vida.

 

 

Encontré el significado que le da valor a mi vida, que no es otro que el de aceptar la responsabilidad sobre mi vida, que no era otro que el de aceptar la responsabilidad sobre mi vida y de mi hija. A partir de ahí empecé a construir un mundo diferente, empezando por el mío propio.

Emy de Horna en su viaje de novios. Cuba

En las culturas más primitivas la gente tiene tanto entusiasmo, que me dio una visión del mundo diferente y me transmitió ilusión. una ilusión que retornaba a mí en forma de ayuda al tercer mundo, aunque, de verdad era el tercer mundo el que me ayudaba a mí. 

Alto de Chibrital, Provincia de Veraguas, Panamá

Nunca he recibido tantas muestras de agradecimiento ni me he sentido tan querido como en aquellos lugares.

Chamana de la Etnia Paduang. Myanmar

Los niños me admiraban, mientras yo asimilaba la naturalidad con la que vivían.

Niñas Jirafas, Tailandia

Todos los humanos nos hacemos o nos deshacemos a nosotros mismos, ya que la mente humana es la mayor herramienta con la que podemos crear o destruir nuestro futuro.

Isla de En medio. Veracruz México

Si tu mente no está oxidada, dale marcha, ya que cuanto más la utilices, mejor te responderá.

Zámbara. Tigresa de Bengala nacida en Torrejón.

Arriésgate y cree en tus propios principios. Lucha por un mundo mejor, donde el ser humano pueda ser libre.

Frontera de Malasia

La libertad es un derecho y la igualdad de oportunidades es la justicia a la que todo hombre de bien debe aspirar, independientemente de su color de piel, clase social o creencias religiosas.

Etnia Chocó. Panamá

Nuestro deber es saber utilizar nuestra mente de una manera correcta.

Anochecer en el Palacio de Ankor. Camboya

Estoy a gusto porque creo en mis convicciones y si he llegado a esta conclusión es porque me he comprometido libremente con todas las cosas que realizo y por eso las disfruto, ya que lo importante en esta vida, no es hacer aquello que nos gusta, sino disfrutar de todo aquello que hacemos.

Sabemos lo que somos, pero no sabemos lo que podemos ser.

Fiesta de Boda en Jordania

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